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Contra las dueñas del feminismo

Más que una lucha unidimensional, el feminismo es un movimiento vivo, dinámico y necesariamente diverso.

Pola Oloixarac

El Feminismo en Debate: La Voz Crítica de Pola Oloixarac

El feminismo, un movimiento vital para la lucha por la igualdad de género, ha sido objeto de críticas y debates internos en las últimas décadas. Pola Oloixarac, escritora y ensayista argentina, ha sido una voz crítica que invita a la reflexión sobre cómo se está desarrollando el feminismo contemporáneo, en especial el fenómeno de lo que ella llama las «dueñas del feminismo». Su postura desafía las narrativas hegemónicas dentro del movimiento, cuestionando el monopolio de ciertas voces que imponen un feminismo único, monolítico y que, a su juicio, tiende a excluir o invisibilizar otras perspectivas igualmente válidas.

Oloixarac plantea que estas «dueñas» han asumido un control discursivo que muchas veces refuerza una suerte de dogmatismo, donde las opiniones disidentes o las experiencias que no encajan en el molde dominante son silenciadas o descalificadas. Para ella, este tipo de control es antitético a los principios inclusivos y democráticos que el feminismo debería defender. Al señalar esta problemática, Oloixarac no busca desacreditar el movimiento en su totalidad, sino ampliar la conversación y abrir el feminismo a una pluralidad de voces y experiencias que enriquecen el diálogo y fortalecen la lucha por la igualdad.

Uno de los puntos centrales de su crítica es cómo el feminismo, en manos de estas figuras dominantes, ha llegado a simplificar problemas complejos en narrativas de víctimas y opresores, dejando de lado la diversidad de experiencias femeninas. Para Oloixarac, el feminismo debería ser un espacio donde la disidencia y el debate constructivo sean bienvenidos, no una arena donde se reprime cualquier voz que no siga la línea oficial.

Este tipo de reflexiones nos invitan a replantear cómo entendemos y practicamos el feminismo hoy en día. Más que una lucha unidimensional, el feminismo es un movimiento vivo, dinámico y necesariamente diverso. Pola Oloixarac nos recuerda que el verdadero poder del feminismo radica en su capacidad de abrazar la diferencia, de ser un espacio donde todas las mujeres, con sus múltiples identidades y experiencias, puedan encontrar su lugar sin temor a ser juzgadas o excluidas.

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